El hombre que tenía prisa... y no deja de sorprender.

Óscar de la Hoya, "el chico de oro" que a todos sorprendiera hace unos cuantos años con su endiablado camino hacia el campeonato del mundo dio ayer un nuevo recital dejando fuera de combate al "matador" Mayorga. De la Hoya sigue siendo el número uno... a pesar de no ser ya un chico, algo muy semejante a lo que se narra en Cinderella man, una película que apenas ha tenido resonancia y no está nada mal.
Hoy es un domingo extraño. El Real Zaragoza juega su último partido de la temporada en la Romareda, pero voy a verlo desde casa. Creo que el desencanto ha tenido algo que ver en ello, y mi padre y yo hemos preferido quedarnos en casa y verlo por la tele. Parece que vamos "primados hasta las cejas", quizá así encontremos la motivación necesaria para ganar un partido... porque ya es hora. Hoy es un día triste para el zaragocismo: Savio se va. Víctor Muñoz parece que también; Toledo y Aranzábal ya están haciendo las maletas... y esperemos que Cani no haga caso a los cantos de sirenas y al representante-vampiro que tiene y acabe por estampar un nuevo contrato con nosotros. En resumen: una temporada estupenda con partidos inolvidables pero con un final de campaña muy poco profesional.
Ha sido una mañana muy literaria y parece que algunos domingos (casi todos) poco tienen de días de descanso... pero también ha tenido momentos más que gratos, he hablado con dos poetas excepcionales (presente y futuro de la poesía) Miriam Reyes y Almudena Vidorreta, y en sus voces noto que pronto van a tener mucho que contar.
Parece que va a llover.